lunes, enero 26, 2015

HARAKIRI: FREE STYLE

"Los fanzines son publicaciones no profesionales producidas por seguidores de un fenómeno cultural particular(como puede ser un género literario, musical o historietístico) para el placer de otros que tienen los mismos intereses." 
Wikipedia



Lo difícil de ser creativo es que mucho de lo que uno tiende a emprender tiene un costo, además del creativo, y me refiero al costo monetario, se puede pensar en un cortometraje pero si no tienes el equipo la cosa no jala, y ya ni hablar de un programa de radio o de TV, sin dinero no se hace nada, ya se podrán imaginar el problema  cuando se trata de algo en el ramo editorial, afortunadamente ahora existen los blogs, sin embargo en el año 2007 no los utilizaba ni sacaba jugo como ahora, en aquellos años estudiaba la universidad y estando en mi división académica de educación y artes yo quería sacar a la luz un fanzine en fotocopias titulado FREE STYLE.

Free Style tenía el propósito de reunir a camaradas que le dieran a la escribida en todos sus géneros, uno que otro poeta y algunos cuentistas, así que heché mano de mis conocidos en ese momento y elaboré un borrador o “dummy” quedando más o menos como les mostraré a continuación, reproduciré los textos de  quienes  eran mis colaboradores por aquellos años, muchos ya dejaron de escribir, otros no han abandonado del todo el plano creativo, pero se mueven con bajo perfil, mi satisfacción mas grande en aquel momento fue, y es hasta hoy en día, esa terquedad de emprender proyectos por muy poco rentables que parezcan.

Agradezco a quienes en su momento me apoyaron con sus textos, aunque Free Style nunca se publicó realmente hoy le brindo un merecido homenaje a sus colaboradores y una palmadita en la espalda a su creador.

Infinitas gracias a Arnold García Rule, Beatríz Castillo de la Rosa, Jesica Fabiola Ortíz Oramas, Betzabe Vidales Guipzott y Antonio Mirabal por sus textos, este post es para ustedes.

Por cierto, han pasado 8 años desde que intenté editar el fanzine, disculpen ustedes lo extemporáneo de algunos textos y editoriales.

Así se quería ser Free Style:



Advertencia

Adelantándonos a los hechos quisiéramos hacer esta pequeña carta aclaratoria para quienes por motivos diversos sientan pasos en la azotea con esta seudo publicación hecha sin ningún cuidado en especial. Primero que nada ningún partido político tiene algo que ver con estas hojas engrapadas. La finalidad de esta publicación es la de otorgar un espacio de expresión de jóvenes para jóvenes y de paso si llega a manos de algún editor que le interese, pues lograr colocar a nuestros colaboradores por medio del reconocimiento de su trabajo y no por palancas. Por otro lado no se pretende ganar cantidades exorbitantes de dinero, ni ser competencia desleal para ningún otra publicación, que no creemos ya que no existen publicaciones tan buenas como estas, peores sí, cualquier anuncio que aparezca aquí es para lograr un intercambio en especie y está condicionado a un arreglo con los interesados y se utilizara para mantener circulando esta publicación, repito y remarco, independiente.

Sé que les sorprende ver una publicación independiente pero en otros estados de la república abundan y de mejor calidad gráfica.

Así que si alguien pensaba pasarse de listo tendrá que inventar algo realmente bueno.

Por cierto, queda abierta la invitación a toda aquella persona que quiera dar a conocer su trabajo en esta publicación, con la condición que sea algo que ayude mejorar el medio de la cultura, literatura, música y en especial el periodismo, pero el de verdad, no el de nota roja sin investigación seria.

Si no te interesa esta publicación regálasela a quien si le interesa.


Editorial.
Lalo Vargas.

¿Realmente nos gustará el anonimato? Es una pregunta que invito a contestar a toda aquella persona creativa por naturaleza. En lo personal tal vez no me guste ser tan anónimo como quiero aparentar, es por eso que me atreveré a firmar esta editorial, para poner fin a mi invisibilidad y a la de mis amigos de la escritura, dibujo, fotografía, pintura y música.

Este escape del anonimato lleva un sello muy especial, los que conformamos este motín nos olvidamos de lo establecido y lo políticamente correcto. No para destruir lo que ya esta escrito en cuanto a las artes en todas sus ramas, si no para que podamos expresar nuestro sentir desde una manera muy peculiar, lo que para algunos pueda ser una rima o un poema, para nosotros, solo es….

Puedo intuir que se avecina una controversia por el nombre de esta publicación, pero el nombre de este fanzine refleja la metodología del rapero, que suelta sus rimas con fluidez dejándose llevar por lo que percibe a su alrededor, porque así es nuestro sentir y así nos gusta vivir, el FREE STYLE (estilo libre), se presenta ante ti.

No importa si se firman con seudónimos o con nuestros nombres propios, el poder ver y saber que tu creación está en la mano de quien lo aprecia es la mayor satisfacción que puede existir, este es solo el primer número de muchos, eso claro, si tu así lo deseas. Si quieres colaborar solo mándanos tus trabajos a freestylemagazine@hotmail.com y únete a nuestro escape. 


Blood And Tears (Rimas Arrimadas)
Por: Arnoldo García Rule

Esta noche llora el corazón.
El pobre es aun incomprendido:
para la mente su dolor no tiene razón
pero él sabe que sin su amor está perdido.

Canta el corazón tristes latidos
de total desdicha y amargura.
Si es tal su tino y su soltura
es por los amores que ya no están unidos.

Llora, llora tonto corazón,
llora por el amor perdido en esta era.
Tú no sabes que has sido cegado por la pasión
y no ves que un nuevo amor se aproxima en primavera.




Hoy mis sentimientos no tienen títulos...
Por: Beatriz Castillo de la Rosa

La cuerda con principio reventó a la mitad,
Con mirada emocionada esperaba algo más,
Era frase larga que anuncia libertad,
Era despedida pera no vernos más.

Sin embargo preparada despedí mi realidad,
Soy humana, Comprendo sus palabras,
Mi rencor se la brindo al factor,
Que sin piedad me desprendió.

Hoy camino un poco lenta,
Compréndame…fue la noticia esperada,
Sin embargo me alienta,
Que soy mujer de palabra.

No se pierde, se gana,
Pues nada es para siempre,
Ni el hambre y la sed
Así como Usted.



...y me largo de mí
Por: Jessica Fabiola Ortiz Oramas

Me encuentro extraña, disuelta en un charco de miedos atroces, ridícula de mí, tonteando en hallar certezas en la más confusa de mis tardes...procurando ser inmune...ser ..Procurando inmune...y la maldita sombra se atasca con burlas de incesantes destierros.

Me harto de mí, de mi yo amante...y se mira la tarde triste y me harto más de mi...y detesto tus ojos que desnudan las caderas, tu risa larga que invita al asombro, y también detesto esa forma tan pálida de dibujarme tu compañía y tus brazos y tu piel blanca, ajena...y me harto más de mi y entre tanto discutir se me deslizan las hojas del árbol triste y seco de ti......Pero, ya te mande al demonio, la vez que yo también me fui.....

Hoy es una estupenda tarde triste, dónde la cuidad baila sin mi, y baila más y sin mi más...me enamora una triste tarde, cuándo me acaricia con un suave y delicado aire que me sabe a suspiro, a deseo y me escurren las horas ......y ya me aburrí de ti y ya me largo de mi..



Estar loco
Por: LaloVargas

Atado a  los nudos de la no razón
Sentado en un oscuro rincón
Con la cabeza entre mis rodillas
Y hablándole a la luna que me espía

Mirando a los duendes que me visitan
Temiendo que los demonios me hagan heridas
Pensar de por que tengo tanto miedo
Temblar cada vez que despierto

Olvidar lo que un día fui
Esperar tan solo la hora de morir
Idear la manera de dejar a los demás
Para así, viajar a donde pueda descansar

Tal vez así seria estar loco
Tal vez lo esté aunque sea un poco
Ya estoy harto de fingir que estoy cuerdo
Loco y olvidado ya me habría suicidado.

Ya no funciono bien en este mundo
Ya no razono, todo esta confuso
Y me transformo en algo que no quiero
Estoy muriendo pero solo es por dentro

Debe haber una razón
O tan sólo una explicación
¿Porqué estoy aquí?, que es lo que tengo que decir
Sólo lo siento como un castigo
Que tal vez lo tenga merecido.



¿Te gustan los 28?
 Por: Beatriz Castillo de la Rosa

Quiero dejar de ser el monstruo que he sido
Merezco que se olviden de mi agravio
Sin embargo me pertenecen los testigos
Como parte defensora del engaño
Aún quedan residuos de memoria
Y aún pienso poco mi pasado
En los haberes pendientes del destino
Y los habidos debajo del sumario
¿Te gustan 28?
¡Y Con Don nadie te has quedado!
¿Los testigos son de los 28 o es del monstruo agraviado?
¡Y los agravios!... ¿Dónde se han tatuado?
¿Te gustan 20?
¡De que te sirven!
¡Si hasta Don nadie se ha marchado!
Y la estúpida pregunta del diario
¡Qué paso, por que se han marchado!
¡Acaso soy el monstruo del sumario!
O realmente soy Don nadie disfrazada de recuerdos,
Soy el recuerdo de los 28 y el cuerpo de nadie
Algunas veces soy el recuerdo de nadie
Y el cuerpo de 28 sin haberlos tocado.


Ella
PorBetzabe Vidales Guipzott

Ella es digna de tu admiración
Ella es quien te roba el sueño
Ella es la que merece tu atención
Ella siempre ella
Y yo…
¿Dónde quedo yo?
Simplemente una imagen más
Una sombra en el corredor
Una voz de tu interior
Un espejismo de tu antiguo amor
Espera un momento…
¿Fui tu amor?
¿O solo tu diversión?
Por ella lloras
Por ella ríes
Por ella amas
Por ella odias
Por mi…
Por mi ni las sobras de tus días…


Soy materia
Por: Lalo Vargas  

Quiero vivir en una burbuja,
Una burbuja de jabón,
Flotar por los aires con libertad,
A la espera que un niño la quiera reventar.

Quiero vivir en una esfera de cristal,
Rellena de agua del inmenso mar,
Estar en la mesa de una vieja gitana,
Caer de sus manos y volverme nada.

¿y si me vuelvo nada, solo estaré pasando a otro estado?

Para mi desgracia no desaparecería,
Solo me transformaría,
Porque sea lo que sea que soy,
Solo soy materia, materia de dolor.




Elegía a Villahermosa
Por: Antonio Mirabal

Salgo del laberinto gris, le tengo rabia a las interminables tardes soleadas, donde nadie se busca, donde nadie se encuentra. Una parte de mí se ha ido, como si hubiese nacido en otro lado, con otro paisaje, con otra persona, siendo yo, siendo otro. 

Y no es odio al Grijalva, o rencor a la simplicidad, pero estoy cansado de que no suceda nada, de no sentir que la tierra vive, estoy cansado del concreto, de los árboles sin tiempo, de las historias urbanas que no se escriben, harto de los parques sin abrazos, de los aterradores museos sin gente, cansado de todos los rostros que he visto, de cada año desde el ochenta y dos. 

Ya no quiero participar engañando, engañándome, no quiero salir a la calle y sonreír mientras escucho a la gente con sus resignaciones eternas, cualquier día de estos me levanto una protesta en contra el aire tan pesado, contra la ranciedad del pueblo, me levanto una protesta contra todos, incluso contra mí. No me hagan tanto caso, es sólo que la ciudad se ve mejor desde el exilio.




miércoles, enero 14, 2015

HARAKIRI: EL REGALO PROMETIDO

"Si no cumples una promesa pequeña 
tampoco cumplirás una grande"
Cormac McCarthy


EL REGALO PROMETIDO.


No sé si alguna vez les pasó que de niños, en Navidad, ustedes le habían pedido algo a Santa y al despertar por la mañana se encontraban con la sorpresa de que, si había juguetes, ninguno era el que habían encargado al gordito simpático, ese que venía del Polo Norte.

Con el pasar de los años, y con un gran trauma encima por haber sido decepcionado por Santa, aunque después entiendes que tus papás hicieron lo que pudieron, te prometes no fallarle a tus hijos y procuras cumplir cabalmente con sus peticiones navideñas y de reyes, y es entonces que haces circo maroma y teatro por conseguir el ansiado “regalo prometido” para no decepcionarlos, y no me estoy refiriendo a la película de Schwarzenegger del mismo nombre, me refiero a ese juguete o cosa que buscas en época decembrina y jamás encuentras por la demanda brutal que tiene, he aquí mi historia.

A partir del estreno de la película “Frozen: una aventura congelada”, de los estudios Disney, se desató una locura entre los niños, especialmente entre las niñas, mis hijas están “poseídas”, por los personajes de Ana y Elsa, a partir de entonces he dicho que esa maldita película me robó a mis hijas, tan solo para Disney “a finales de marzo (2014)   Frozen había superado los 1,000 millones de dólares en recaudación de taquilla, lo que le convierte en el filme de animación más exitoso de la historia del cine.”( http://www.cnnexpansion.com/negocios/2014/05/06/039frozen039-impulsa-ganancias-de-disney).

Frozen se convirtió en la mina de oro de Disney y ha enajenado a miles de pequeños consumidores, entonces cuando mi señora madre me hizo el favor de investigarme qué era lo que mis hijas querían para Navidad, la petición no podía ser más obvia, la mayor quería un Scooter de Frozen y la más pequeña un triciclo de Frozen, suena sencillo, ¿verdad?, pues no lo es, y menos cuando cientos de niñas tabasqueñas quieren lo mismo, pero de eso me daría cuenta después.

Siempre me he considerado un tipo listo, entonces como sabía de la demanda de esos juguetes decidí ir a la segura, según yo, y sabiendo de mi precaria condición económica, no es broma realmente es precaria, decidí comprar el 12 de diciembre en la venta nocturna en línea de Liverpool, me ofrecían el 30 % de descuento y hasta meses sin intereses, no perdí el tiempo busqué los juguetes e hice mi pedido, y hasta agarré una promoción genial, 20 % de descuento y 20 meses sin intereses, cuando vi eso me dije: ¡de aquí soy!, es más, como se me hacía muy poca cosa para mis princesas, decidí comprarle a la mayor su casco y protectores para disminuir rodillas y codos raspados, un karaoke de la Dra. Juguetes y a la más pequeña un peluche interactivo que hasta le dice su nombre, me armé chido para Navidad, cual sería mi sorpresa al enterarme que cada artículo me llegaría por separado a mi domicilio aunque los hubiese comprado el mismo día al mismo tiempo, y eso está mal señores de Liverpool, primer desencanto con Liverpool.

Efectivamente, los juguetes fueron llegando a cuenta gotas, y llegaron todos, menos el “regalo prometido” de mi hija mayor, el Scooter de Frozen, llegó el día de noche buena, Navidad y nada, y pues tuve que entregar a medias lo que santa les había dejado a mis bebés, y como no viven conmigo, mi mamá la hizo de mensajero de Santa llevándole sus juguetes, un poco tarde, porque la anécdota que marca este post es que mi hija de 4 años al no ver juguetes en casa de sus abuelos paternos, que no celebran Navidad, ni cumpleaños, dejó escapar un sincero: ¡méndigo Santa Clos, no me trajo nada!, y yo al escucharlo de mi madre, quien había charlado por celular con mi chaparrita, me sentía el peor padre del planeta, sin embargo esa misma tarde le llegaron sus juguetes a mis niñas, pero seguía haciendo falta el “regalo prometido”.

Antes del 25 de diciembre decidí hablar al 01 800 de Liverpool para preguntar por el regalo que hacía falta, me tuvieron esperando 20 minutos en la línea y cuando al fin me contestaron me dijeron que mi paquete sí había llegado a Tabasco, pero había sido reportado como dañado, que tenían que resurtirlo, pero que al no tener en existencia, tardaría 25 días más, por educación a la señorita que me atendió y que sé no tenía la culpa, no los mandé al diablo, les hice saber que no esperaría tanto tiempo y cancelé ese pedido.

Fue entonces que supe que estaba en problemas, el  25 de diciembre con la mitad de los comercios cerrados me lancé en una búsqueda frenética del bendito Scooter de Frozen, fui a Del Sol, Walmart, Almacenes Chedrahui, Liverpool Altabrisa, Juguetrón, una tienda de bicis por el mercado, Coppel ese día no abrió, y nada, había otros Scooter´s, pero no de Forzen, me sentía muy mal, le había fallado a mi niña.

El viernes 26 de diciembre me di una vuelta por el Palacio de Hierro, pregunté por el juguete y el joven que me atendió me dijo que toda la mercancía de montables de Frozen se les había agotado, esa diabólica creación de Disney había disparado el consumismo a niveles inimaginables, el chico me pidió mis datos por si les surtían de nuevo, sabía que no me llamaría, así es el nivel de atención en Tabasco.

Del Palacio de Hierro fui al lugar que inició todo este peregrinar, porque la primera vez que mi hija vio un Scooter de Frozen había sido allí, Coppel, fui al que se encuentra en Soriana San Joaquín, entré cruzando los dedos y rezando porque hubiera un Scooter de Frozen, caminé hasta las bicicletas y montables y nada, me quería arrancar el cabello de la cabeza, entonces vi a un empleado y le pregunté, este llamó a otro empleado y entonces un joven delgado apareció con buena actitud y me preguntó cómo me podía ayudar, le expliqué, apenado me dijo que no tenían en ese momento pero aun así se tomó el tiempo de revisar su listado de inventario, lo buscó y copió el código, lo rastreó en su computadora y lo ubicó en otra tienda, me ofreció cobrármelo y enviármelo a domicilio en un plazo no mayor a tres días, acepté, no tenía más opciones, el joven se portó a la altura de la circunstancia, me atendió excelentemente bien y no me dio el avión como lo habían hecho los demás vendedores de otras tiendas de supuesto más caché como lo son Liverpool y el Palacio de Hierro, pagué mi Scooter a las 20:00 del 26 de diciembre.

EL sábado 27 de diciembre a las 12 del día el camión de entregas de Coppel estaba entregándome el Scooter de Frozen, sin excusa ni pretexto, yo estaba sorprendido y feliz, por fin el “regalo prometido” estaba en mis manos, les agradecí y felicité a los muchachos de la entrega y me dijeron que su consigna era entregar los regalos antes de día de reyes que estaba la vuelta de la esquina.

LA LLEGADA DEL REGALO PROMETIDO ENVIADO POR COPPEL.

Abrí el paquete y descubrí que el juguete tenía que ser armado, puse manos a la obra y lo dejé listo para llevárselo a mi niña. El Lunes 29 de diciembre le llevé su regalo a mi niña, estaba contenta y yo aliviado, había cumplido mi encomienda, podía morir en paz, disculpé a Santa con mi hija por la demora, porque ella preguntó la causa de la tardanza de Santa, así que argumenté que tenía muchos pedidos iguales y tuvo que regresar al Polo Norte por más juguetes como ese.

EL REGALO PROMETIDO DESARMADO.

EL REGALO PROMETIDO ARMADO.

Por la noche, cuando regresé a casa, me topé con que el camión de Liverpool me había dejado un paquete embalado, por la forma pude adivinar que se trataba del “regalo prometido”, el mismo que me habían dicho que no llegaría sino hasta 25 días después, el mismo que yo había cancelado por esa razón, el mismo que yo ya había comprado en Coppel y le había entregado a mi hija, me quería morir.

EL REGALO PROMETIDO ENVIADO POR LIVERPOOL Y QUE SE SUPONE YA HABÍA CANCELADO.

Llamé nuevamente a Liverpool, me volvieron hacer esperar como 20 minutos para contestarme, expliqué mi dilema y pedí se arreglara el asunto, ellos habían cometido dos errores garrafales, uno al no entregar a tiempo el juguete y otro al no haber notificado mi cancelación, entonces tuve que exigir me devolvieran el monto del juguete y se llevaran el que me habían enviado, se me hacía el colmo que si lo habían enviado por error ahora yo tenía que regresarlo, pero al final llegamos a un acuerdo y lo regresé a la tienda y ellos me regresaron el monto del juguete en monedero, el jefe de juguetería fue muy amable, no así una empleada de ahí mismo que fue nefasta.

Como pueden ver Liverpool perdió mil puntos conmigo así como el Palacio de Hierro, Coppel, gracias a su empleado y su sistema de entregas me hizo reconsiderar su servicio que en lo general es muy malo en tiendas, cajeras groseras y empleados nefastos, si bien un mal elemento hace que juzguen mal a todos, un buen elemento puede dar la misma percepción cuando hace bien su trabajo, deja una buena impresión en general aunque los demás sean mediocres y groseros.


Un dato cultural, el precio del scooter marca apache en Liverpool era de $ 999.99, con el 20 % de descuento me quedaba en $799.25, sin embargo en las demás tiendas como Walmart y DelSol estaba en $725.00 de contado y sin descuento, y finalmente el que compré en Coppel, que no era apache, me costó $ 500.00.

lunes, enero 12, 2015

ESCRITOR DEL DESTINO. ENTREGA FINAL.

"El destino, el azar, los dioses, 
no suelen mandar grandes emisarios en caballo blanco, 
ni en el correo del Zar. 
El destino, en todas sus versiones, 
utiliza siempre heraldos humildes."

Francisco Umbral
escritor español.






El “Escritor Berserker” asistía por las mañanas puntual al café, era el primer cliente, la mayoría de los meseros lo conocían, se habían aprendido su rutina, por la mañanas leía el periódico, le gustaba ordenar un café americano acompañado de bísquets con mantequilla y mermelada a la plancha como entrada, como desayuno, huevos con chilaquiles, jugo de zanahoria o de toronja según fuese el caso y a medio día, como botana, dedos de queso o alitas, para la comida su caldo tlalpeño y como postre un chees cake con fresas. Si no era para servirle algo de comer o beber no debía ser molestado, le veían martillar las teclas de su laptop con una concentración impresionante, sus pensamientos eran acompañados por la música que salía de unos audífonos diminutos conectados a su máquina.

Cada día, sentado en ese lugar, mirando hacia el banco  reconstruía en su mente una y otra vez de manera obsesiva la historia que pretendía contar, de principio a fin, se decía a sí mismo que, si su objetivo real fuese el de robar el banco las cosas no podían salir mal. A lo lejos, en una mesa de fondo del restaurante, un hombre que parecía no poder estar sin su celular no le quitaba la vista de encima al joven escritor. Ese había sido el último día de Pancho escribiendo, esa misma noche enviaría su trabajo, pagó la cuenta y se fue a su casa, ya estaba anocheciendo.

Cuando llegó a casa sentía que los dedos se le engarrotaban de tanto escribir, ya le había pasado antes, con el uso de las computadoras también habían aparecido padecimientos nuevos en cuanto a lesiones en articulaciones por malas posturas, en más de una ocasión Pancho había sentido que perdía fuerza en sus manos, no había sido de la noche a la mañana, fue gradual, se le caían jarras con agua, vasos, bolsas con contenidos no tan pesados, hasta su pulso era errático en ocasiones.

En el último boletín informativo de la televisión se confirmaba que los policías entrarían en huelga a partir de las primeras horas de la mañana siguiente debido a que no se había llegado a un acuerdo con sus jefes por lo que se presumía que eso incrementaría la crisis de inseguridad por la que estaba atravesando la ciudad, inmediatamente después  se daba cuenta del aumento en los niveles de los ríos por causa de las precipitaciones registradas en las últimas horas, Pancho no daba crédito a tanta mala noticia, recordó que tenía que enviar su trabajo ya que esa noche se cumplía el plazo que le había dado la editorial, sentado en su computadora satisfecho con su trabajo lo releía por última vez por si necesitaba hacer cambios, escuchaba el televisor en la sala y los testimonios de la gente que comenzaba a sufrir afectaciones por el agua, decidió apagar el televisor porque no se concentraba en lo que estaba haciendo, sus ojos recorrían línea por línea el texto que con tanta dedicación había trabajado, cuando llegó a la última palabra le dio guardar de nuevo, abrió su correo, escribió la dirección de la editorial, anexó el archivo y lo envió.

No tenía sueño, los nervios lo mantenían despierto, miró su librero y buscó con la mirada algún título que llamara su atención pero no encontró nada, a un lado del sillón se encontraba una mesita con los periódicos del día, los leería para ganar sueño, recordaba la infinidad de veces que había soñado con ser columnista de algún diario local, pero posiblemente su falta de talento, o de palanca, no le había permitido materializar ese deseo, le gustaba mucho que los columnistas iniciaran sus textos con frases o citas textuales de personajes o escritores famosos,  justo en ese momento se encontró con una frase de Joël Dicker, de quien tenía un libro muy bueno, que decía “No escriba más que ficción. El resto le traerá problemas”, eso lo hizo reflexionar por un momento sobre el trabajo que le habían encargado, se acomodó en el sillón, cerró los ojos y pensó que lo bueno de su escrito es que era solo era eso ficción, de lo contrario estaría metido en un gran problema, se quedó dormido.

Esa mañana el celular emitió una alerta, se trataba de un correo nuevo en su bandeja de entrada, tentó alrededor de su cama buscando el aparato, no tenía muchas ganas de abrir los ojos, pero no de no hacerlo no podría leer el mensaje, desbloqueó el teléfono y la luz que emitía lo cegó por un momento, era una especie de vampirazo por haber despertado recientemente, alcanzó a leer que se trataba de un mail de la editorial, le notificaban que habían recibido su trabajo y que en breve se comunicarían con él para informarle si procedía el pago de sus honorarios o tendría que hacer correcciones; solo le quedaba esperar el veredicto final y por supuesto la paga, que sabía no equivaldría ni siquiera a los días que había pedido en el trabajo ni lo que había gastado en el VIP´S el cual esa mañana también visitaría a manera de despedida.

Tomo un taxi al restaurante, la ciudad se veía rara, en las principales avenidas no se avistaba ningún vehículo de Seguridad Pública ni de Tránsito del Estado, los policías habían  cumplido su amenaza, el taxista se pasaba los altos, eso sí, con precaución, manejaba a exceso de velocidad también de manera precavida, Pancho no sabía si eso era posible pero al no matar ni chocar a nadie durante el trayecto el taxista demostró que de alguna manera si era posible.


Pancho le pagó al taxista y miró hacia el banco, aún no abrían y ya se podía apreciar una fila importante, 15 o 20 personas tal vez, no envidiaba para nada a quienes trabajaban en los bancos, eso de tener que atender tanta gente todo el día no le parecía ni divertido, ni saludable, pensaba que era triste hacer eso, pero suponía que alguien tenía que hacerlo, por algo él no trabajaba en uno, entró para acomodarse en su lugar de siempre, ahí donde había estado trabajando el texto que le había pedido la editorial, el lugar que le gustaba porque desde allí podía ver todo lo que ocurría, sacó su celular y miró la hora, las 08:29 de la mañana, una sonrisa se dibujó en su rostro pues recordó que según su texto a las 08:30 en punto de la mañana debería escucharse una explosión en el banco, señal del inicio del robo, mirando el reloj digital del celular inició una cuenta regresiva, contó: diez, nueve, ocho, siete, seis, cinco, cuatro, tres, dos, uno y simuló una explosión, comenzó a reír al darse cuenta que fantaseaba como un chiquillo, se puso de pie para ir al baño y a medio camino sintió una vibración bajo sus pies y escuchó como las ventanas de donde había estado sentado se venían abajo, no daba crédito a lo que veían sus ojos, salió corriendo hacia la calle, humo negro se salía del banco , tres sujetos encapuchados corrían con maletas en mano, nadie hacía nada por detenerlos, no parecían armados, no había vehículo alguno esperándolos, corrieron hacia el malecón, entonces Pancho supo lo que ocurría, tomó una ruta diferente para alcanzarlos, tenía que asegurarse que lo que estaba pasando no estaba pasando, era imposible, por más que corrió no pudo alcanzarlos, de todos modos qué haría si lo hubiese logrado, entonces al llegar a donde terminaba el camino y comenzaba el río se veían los barandales del CENMA, pudo ver como los ladrones surcaban las aguas del río Grijalva en motos acuáticas con rumbo aparentemente desconocido para muchos, pero no para él, Pancho se encontraba en shock, si en ese mismo momento aparecía Joël Dicker sería para decirle, ¡chico, te lo dije!    

Pancho llegó a su casa caminando, todo el trayecto había intentado convencerse así mismo que nada de lo que había sucedido había sido cierto, de alguna manera alguien había robado ese banco de la misma forma en la que él lo había escrito en su texto, el texto que la editorial le había solicitado, técnicamente eso lo convertía en el autor intelectual del robo, comenzó a ser presa de la paranoia, cerró ventanas, cortinas, desconectó el teléfono, su modem y cuando se disponía a apagar su celular le llegó un mail, en el remitente se podía leer “la editorial”, en el asunto “Felicidades”, dudó en abrir ese mensaje, le temblaban las manos, tenía miedo, cómo diablos se había metido en todo esto, seguramente ahora querían matarlo, no podían dejar cabos sueltos y seguramente en ese mail estaba su sentencia de muerte, tiró el teléfono a la cama de su habitación, fue derecho a su sala, buscó el control de la televisión, necesitaba saber qué había pasado, las noticias se lo dirían, aunque él sabía mejor que nadie lo ocurrido, en realidad lo que quería saber era si lo relacionaban con el suceso, por fin después de buscar como loco pudo encontrar el control remoto, encendió la televisión en busca de respuestas, aún no era hora de noticias, entonces muy a pesar de su miedo fue a buscar el celular a su habitación pues sabía que en las redes sociales podía encontrar noticias casi de manera inmediata, no se había equivocado, todo Villahermosa twitteaba videos sobre el robo, fotografías del edificio con humo saliendo de su interior, no se reportaban muertos ni heridos, siguió todos y cada uno de los links que hablaban del tema, al parecer la huelga de policías había dejado sin vigilancia a la ciudad entera, se habían registrado robos menores pero el golpe del día había sido el robo al Banco de México con sucursal en el centro de la ciudad, otro twitt daba el monto de lo robado 10 millones de pesos, era increíble, Pancho pensaba que no todo sería tan malo si por lo menos una parte de ese dinero le hubiera tocado a él, con eso hubiera logrado pagar sus deudas y hasta largarse de la ciudad para comenzar una nueva vida, el celular volvió a emitir la alerta sobre el mail que no había leído, respiró profundo y decidió abrirlo, miró el mensaje, “si quieres respuestas, respira profundo y relájate”, ¿era acaso una broma?, pensó Pancho, habían utilizado un texto suyo para robar un banco y le pedían que se calmara, caminó hasta la sala y entonces sintió un escalofrío por todo el cuerpo, frente a él se encontraba un sujeto sentado en su sillón favorito con un celular en la mano, mismo que guardó al percatarse de la presencia de Pancho, lo miró, le sonrió y con un ademán le indicó que se sentara, Pancho intentó salir corriendo pero un movimiento de la mano de aquel extraño bastó para detenerlo, de manera amable le volvió a pedir tomar asiento, el joven escritor comprendía que por algún motivo aún seguía con vida así que decidió aceptar la invitación, ya mirándolo bien aquel tipo se le hacía familiar, hizo memoria, su cara, el celular, claro que lo conocía, se había topado con él un par de veces, en el VIP´S y en el CENMA, seguramente era un espía de la mafia y comenzó a sacar conclusiones y a hacer conjeturas hasta que aquel extraño levantando la mano le pidió detenerse, le felicitó primero por su trabajo, se presentó como “el reclutador”, trabajaba para “la editorial” y el texto que le habían solicitado a Pancho había sido su examen de admisión al selecto grupo de “escritores del destino”.

Los escritores del destino, según el reclutador, eran un grupo de personas que escribían el día a día en el libro de la vida del planeta tierra, ellos hacían que las cosas ocurrieran o dejaran de ocurrir en este planeta, sin embargo para lograr un equilibrio en el universo había que escribir cosas buenas y cosas malas, “la editorial” marcaba la pauta, entregaba la orden de trabajo a uno de sus escritores del destino y luego otro grupo hacía que sucedieran las cosas, todo era parte de un sistema bien estructurado, como los engranajes de un gran reloj, así le explicaron a Pancho, ni una palabra más, ni una palabra menos.

El reclutador estaba con él para ofrecerle trabajo en la editorial como escritor del destino, para lo cual debía abandonar todo lo que tenía para poder ser aceptado, se olvidaría de deudas, problemas, amigos y familia, pero cuando escuchó familia vino a su mente la imagen de sus hijas, no estaba dispuesto a dejarlas, si bien económicamente estaba arruinado la solución a sus problemas no era desaparecer para trabajar con la editorial, quería explicarle al reclutador pero al parecer este podía leer la mente pues le regaló una sonrisa a Pancho y le explicó que entendía su posición, el reclutador se puso de pie y sacó el celular de su bolsillo, Pancho le preguntó si no pretendía borrarle la memoria con una lamparita o darle un capsula para olvidarlo todo, el reclutador le respondió que dejara de ver tanta televisión, que no le preocupaba si decidía contarle a alguien o no, al final de cuentas dudaba que le creyeran, le recordó que siempre había un lugar en la casa de la risa para esos paranoicos que contaba cosas raras , después de decir eso, salió por la puerta sin decir nada más.

Un año después, en una feria del libro universitario, una fila considerable impedía el libre tránsito por el recinto sede del evento, bajo el sello de una editorial independiente un escritor novato estaba causando revuelo entre los jóvenes adeptos a los relatos fantásticos, el título de la obra que se promocionaba era el de “El Escritor del Destino y Otros Relatos”, ese día el autor estaba firmando los libros personalmente, y en la fila era el turno de un sujeto que al parecer apenas lo estaba terminando de leer, Pancho no alcanzaba a ver su rostro puesto que aquel tipo traía a la altura de su cara la publicación, el escritor le preguntó a quién dedicaría la obra y al tiempo que el lector bajaba el libro le pidió que a nombre de El Reclutador, Pancho casi se cae de la silla, pero su interlocutor le sonrió y le guiño un ojo, eso hizo que el joven escritor se calmara firmando el libro con más tranquilidad, el reclutador tomo su ejemplar y se despidió no sin antes decirle a Pancho que esperaba que no los demandara si alguna vez decidían usar alguno de sus textos ya que al final de cuentas no eran tan malos. 

viernes, enero 09, 2015

ESCRITOR DEL DESTINO. 4ta. ENTREGA

"Usted ve, pero no observa"
Sir Arthur Conan Doyle

"La más noble función de un escritor es dar testimonio, 
como acta notarial y como fiel cronista, 
del tiempo que le ha tocado vivir"
Camilo José Cela 

VIP´S y BANAMEX, Centro Histórico, Villahermosa Tabasco. Google Map.
A Pancho le gustaba mucho la música, el cine, la literatura, los comics, la animación japonesa, algo de filosofía y otras tantas loqueras que lo encasillaban en la categoría de aspirante a escritor de ciencia ficción, novela policiaca, guion de comic u otra cosa de esas que algunos supuestos defensores de la cultura no consideraban como literatura, había un pequeño grupo de cultureros que no apreciaba a esos locos personajes como Tarantino, Robert Rodriguez, Guillermo del Toro, etc., ya que creían que tipos como ellos le quitaban seriedad a ese cerrado círculo intelectual que solo admitía a poetas, trovadores, pintores, fotógrafos y directores de cine realizadores de películas tan profundas que solo las entendían unos cuantos, Pancho en el fondo pensaba que tal vez había errado el camino y que sería mejor ser como ellos, lograr el reconocimiento de parte de otros escritores o creativos no era trabajo fácil, pero posiblemente trabajando duro lo conseguiría.

Pasaron varias semana antes de que Pancho recibiera las instrucciones para el texto que tendría que trabajar, las instrucciones fueron: “Saludos, para probar su capacidad de redacción le haremos un primer encargo, deberá redactar una historio donde un grupo de ladrones de banco planea un robo en una sucursal específica logrando hacer el atraco sin disparar un solo tiro, además debe considerar todos los imprevistos que se puedan presentar en una acción así, nuestro sello editorial pretende distinguirse por ofrecer historias lo más verosímiles posibles, le proporcionamos los datos del banco en que deseamos se lleve a cabo el supuesto atraco. El banco en cuestión es el Banco Nacional de México ubicado en Av. Francisco I. Madero Col. Centro. Tiene una semana para entregar el texto, mismo que será sujeto a revisión por nuestros editores expertos. Sin otro particular quedamos a sus órdenes. La editorial.”

Después de leer lo que la editorial estaba solicitando Pancho decidió ingresar los datos de la dirección en el mapa del buscador de internet para conocer bien el terreno, ya en alguna ocasión había pasado por ese lugar y entre sus miles de pensamientos ociosos había creado en su cabeza un asalto a ese mismo banco, pero con la firme idea de no lastimar a nadie, lo malo es que se trataba del centro histórico de la ciudad capital y el tráfico era un verdadero desastre, escapar en auto no era una opción, así que para que las ideas le fluyeran mejor decidió ir a darse una vuelta hasta el lugar, eso le ayudaría a describirlo mejor para los lectores cuando tuviese que redactar su trabajo.

Esperó a que su jornada laboral terminara en el empleo que le daba de comer, pero que ahora, solo le permitía pagar la hipoteca de la casa de sus hijas y medio subsistir para seguir haciéndolo, por eso había buscado otro empleo, por eso ahora necesitaba ser más creativo que nunca, por eso requería trabajar duro para que todo el mundo se fijara en él, en su trabajo, en sus habilidades, en su talento, y de esa manera poder dejar atrás cualquier problema económico, él sabía perfectamente que el dinero no daba la felicidad, pero hacía mucha falta para poder olvidarse de algunos problemas que no lo dejaban buscar su felicidad inmediata.

El centro no era un mal lugar, a pesar del ambulantaje, la inseguridad y de la gente pidiendo caridad este tenía su encanto, es más era posible que todos eso que le ayuntamiento veía como cosas negativas fuesen, al final de cuentas, lo que le daba cierto color. Pancho gustaba de ver en acción a los artistas callejeros, una buena estatua viviente y ese tipo de cosas, si tenía suerte se encontraría con alguno, pero haciendo cosas que posiblemente no le llamaban tanto la atención, entonces en el mejor de los casos buscaría donde comer y luego dónde comprar un buen café.

Entró al VIP´S cerca del banco y en la recepción tomó un diario de circulación local, en el encabezado se hablaba del emplazamiento a huelga de la policía del estado, pedían mejora salarial, horarios de trabajo justos y aumento en prestaciones, Pancho no creía que la huelga se realizara, no imaginaba una ciudad sin policías, eso sería un evento extraordinario, y eso sí que sería noticia, y mientras cavilaba sobre el asunto no se percató que un tipo venía entrando al restaurante y por venir escribiendo texto en su celular se tropezó con Pancho en la recepción del lugar,  el golpe no fue para tanto pero no le hizo gracia al joven escritor quien a pesar de recibir disculpas del distraído sujeto no pudo ocultar su molestia.


Una vez que le asignaron mesa pidió un café americano, un caldo tlalpeño y como postre un pay de queso con fresa, mientras la mesera se disponía a enviar la comanda a la cocina Pancho siguió leyendo el diario, tenía una sección histórica en la que se comentaba la forma en la que se hacía el comercio en la vieja Villahermosa, y este era de manera pluvial, el Rio Grijalva servía como una ruta comercial que permitía a los campesinos y comerciantes moverse a lo largo y ancho del río con sus mercancías, fue entonces que miró por el ventanal del restaurante y tuvo una visión, una sonrisa se le dibujo en el rostro y esperó feliz su comida.

Después de comer y pagar la cuenta salió hacia la Av. Franciso I. Madero con dirección al banco y justo en la esquina dobló hacia la derecha que ya era la Av. 27 de Febrero hasta topar con lo que alguna vez había sido el Malecón de Villahermosa, aún estaba ahí, pero después de las inundaciones del 2007 le construyeron una pequeña muralla al río Grijalva quitándole la vista que antes era más agradable.

Estando sobre el Malecón Carlos A. Madrazo enfiló hacia el CENMA, un proyecto que aglutinaba varios negocios para hacer una especie de corredor turístico y de entretenimiento con varios centros nocturnos y algunos restaurantes, y una vez allí caminó hasta donde podía ver el río y terminó de convencerse de que lo que se le había ocurrido en el restaurante era totalmente posible de emular, justo cuando se disponía a retirarse giró para emprender su rumbo y se tropezó con alguien, se trataba del mimo tipo con el que se había topado en el VIP´S, esa era una de esas coincidencias que no le hacían gracia, nuevamente el tipo se disculpó y siguió su camino con celular en mano.

Cuando regresó a su casa siguió pensando cómo redactaría la historia que necesitaba escribir, y para descansar la mente un momento encendió la televisión  y comenzó a cambiar canales para ver si encontraba algo que le llamara la atención, a veces se le hacía increíble que si un sistema de cable o tv de paga tenía 100 canales, esos 100 canales transmitieran solo basura, aburrido por no encontrar nada se vio interrumpido en su intención por el reporte del tiempo donde se pronosticaban lluvias torrenciales para las próximas horas, su teléfono comenzó a emitir alertas de mensajes nuevos, le dio un vistazo solo para descubrir que los mitoteros del twitter estaban armando una revolución ya que se rumoraba que aprovechando el reporte del clima era muy seguro que en las presas hidroeléctricas estarían turbinando para desfogar un poco de agua, de ser cierto por la mañana los ríos de Tabasco tendrían un incremento considerado.

Se quedó dormido con el teléfono en la mano y vino a recobrar el sentido del tiempo justo a la hora del último noticiero nocturno, la nota principal era que al parecer los policías del estado estaban listo para iniciar su huelga en 6 días más, un día antes de ese día tenía que entregar su texto, según el reportero las negociaciones iban avanzando pero aún no llegaban a un acuerdo, eso a Pancho le sonaba familiar, él sabía que se trataba del típico estire y afloje entre el patrón y el sindicato, sabía que se trataba de un juego póker donde el que supiera jugar mejor sus cartas por muy malas que éstas fueran sería el ganador, aunque en esta ocasión si el líder sindical se vendía la causa de los polis estaba perdida.

Pancho pidió permiso para faltar dos semanas a la oficina para poder dedicarse  de lleno a ese primer texto que le estaban pidiendo, así que esa mañana se despertó lo más tarde que pudo, le dolía el cuerpo por haber estado acostado tanto tiempo, los parpados hinchados de tanto dormir, decidió volver al banco que sería su escena del robo ficticio sobre el cual debía escribir, tomo un taxi hasta el lugar y al llegar al banco pidió un turno para hablar con un ejecutivo de cuenta, estaba dispuesto a perder una mañana en ese lugar para poder observar el ambiente y así describirlo sin equivocación en su narración, le había tocado el turno 150 y apenas estaban atendiendo al número 100, comenzó a desesperarse y a caminar por la sala de espera, sin darse cuenta quedó cerca del escritorio de quien al parecer se trataba del gerente, lo dedujo por la placa con su nombre y cargo que estaba prendido a su camisa, fue entonces que Pancho se sintió más fregón que Sherlock Holmes, ¡elemental mi querido Pancho, elemental!, se decía así mismo mientras fingía leer un tríptico sobre créditos hipotecarios.

A Pancho no le gustaba la idea de escribir una novela larga, siempre decía a sus conocidos que lo atribuía a su falta de paciencia, se sabía desesperado y eso se reflejaba en su forma de escribir, decía que en su cerebro las historias estaban desarrolladas y terminadas, pero en papel no era así, según él pensaba en imágenes, cuando creaba un cuento nuevo se le venían a la mente escenas del cuento, no las letras ni las palabras, por eso odiaba no saber dibujar ya que consideraba que como ilustrador si hubiese conseguido algo profesionalmente, en cambio la lectura se le hacía tan poco popular, o al menos así era entre sus conocidos, eso le restaba ánimos, muchos de sus conocidos no escribían historias, ni leían, pero cuando él les compartía un texto todos se convertían en críticos de literatura y no le daban muy buenas referencias, Pancho no quería que lo engañaran, pero le costaba creer que fuera tan malo, en más de una ocasión había leído y visto en el cine, argumentos que a él mismo se le habían ocurrido, sus amigos y conocidos gustaban de esos argumentos, pero como se trataba del trabajo de escritores consagrados tenían un valor agregado, sin embargo en su caso solo se trataban de intentos y sueños de convertirse en escritor, así lo percibía él, así lo hacían sentir y posiblemente tenían toda la razón.

Se sentó a esperar en una de las sillas, ya habían avanzado 25 lugares, esperaría un poco más, el gerente seguía hablando por teléfono, le escuchaba decir cosas como: ¡esa cantidad es muy grande!, ¡somos una sucursal pequeña!, ¡aparentemente nadie sospecharía nada!, ¡la seguridad está comprometida!, entre otras, Pancho no sabía bien a bien de qué se trataba pero su cerebro de escritor ya había sacado sus conclusiones y escrito su propio argumento sobre lo que el gerente conversaba por teléfono, hizo bolita el pequeño papel de turno y se fue con rumbo al VIP´S.

Decidió que el VIP´S, que estaba antes del banco, sería su centro de operaciones, utilizaría el mismo horario que el de la oficina donde trabajaba, solo que agregando tiempos extras para poder entrar en un estado de trance al que él llamaba “Escritor Berserker”, los berserker, según las leyendas nórdicas, eran guerreros vikingos que combatían casi desnudos, ataviados con pieles de animales como osos, bajo cierto trance de perfil psicótico, mismo que se cree era auto inducido por la ingesta de hongos alucinógenos como la amanita muscaria, o por la ingesta de pan o cerveza contaminada por el cornezuelo del centeno (un hongo parásito que se da en las espigas del centeno), con altos contenidos del ácido lisérgico, precursor del LSD. Entonces al entrar en un trance causado por muchas horas escribiendo Pancho se convertía en Escritor Berserker.

Continuará...